Meana no acepta la imposición de HH

A pesar de la decepción que supuso la ausencia del Mundial de Suecia, que constituía además su segunda ausencia mundialista consecutiva, Manolo Meana fue confirmado por la Federación con vistas a la recién estrenada Eurocopa de Naciones y el Mundial de Chile de 1964. Meana dirige los primeros encuentros amistosos de preparación para estos torneos, sin embargo hasta que a mediados de junio de 1959 -pocos días antes del estreno de la selección en la Eurocopa- el comité directivo de la RFEF, presidido por Lafuente Chaos, aprueba incorporar al staff técnico de la selección al entrenador del FC Barcelona, Helenio Herrera, como preparador del equipo nacional. La medida no es aceptada por Meana, que presenta su dimisión como seleccionador.

La Federación ratifica a Helenio Herrera como preparador de la selección, no como seleccionador, y el entrenador hispano-argentino, sin Meana, se convierte en el máximo responsable técnico del combinado nacional. Herrera empezó a "profesionalizar" la selección (introdujo un masajista, entrenamientos más asiduos, rutinas de comidas y descansos...), lo que se notó en el doble enfrentamiento con Polonia, que supuso el debut de España en el nuevo torneo continental. Sin embargo, la "política" entró en escena y a Helenio Herrera y sus jugadores le impidieron continuar una fase más en la Eurocopa de Naciones.

Franco prohíbe a España enfrentarse a "los rojos"

El equipo español se concentra el 24 de mayo en Madrid para viajar el 27 a Moscú, donde debía enfrentarse a la URSS en la segunda eliminatoria de la Eurocopa. Sin embargo, nunca llegó a coger el avión. El 25 de mayo, cuatro dias antes del encuentro, la Federación Española publica un escueto comunicado en el que anuncia a la FIFA la suspensión de los partidos entre ambas selecciones. Al parecer, la decisión se tomó en el Consejo de Ministros presidido por Francisco Franco.

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